SABER VIVIR COMUNICACIÓN, S.L.
Durante esta época del año aumenta el riesgo por picaduras de insectos, garrapatas, o medusas. Evitar caminar descalzos al aire libre; usar pantalones y camisetas con mangas; prescindir de colores fuertes y perfumes en áreas abiertas, como por ejemplo campings y piscinas; tirar la basura en recipientes cerrados y no dejar restos de comida, son algunas de las recomendaciones a tener en cuenta.
Abejas, avispas, tábanos
Ante una picadura de abeja hay que intentar extraer el aguijón con unas pinzas y limpiar la zona con agua y jabón. Si se trata de una avispa, ésta no deja el aguijón dentro, bastará con limpiar, al igual que ante la mordedura de un tábano. Hay que vigilar, sobre todo, que no se sufra alergia. Si hubiera síntomas de ella (dificultad para respirar, por ejemplo) acude a un centro médico con urgencia.
Medusas
Es uno de los accidentes más comunes durante el verano. Tras la picadura, se suele producir enrojecimiento, hinchazón y dolor en la zona expuesta a la picadura. Se suele tratar en el centro de socorro de la propia playa y comienza con la aplicación de agua salada o agua de mar para eliminar los tentáculos, compresas de agua fría para aliviar la inflamación y una crema de corticoides si es necesario. Los días siguientes, hay que estar atento para evitar una infección.
Garrapatas
En primer lugar, se debe extraer con precaución la garrapata para impedir que su aparato bucal se quede dentro de la piel, ya que a través de él inyecta la saliva y transmite infecciones. Se deberá extraer de forma perpendicular a la piel y con un tirón firme. Tras ello, lavar con agua y jabón. Lo normal es que tras la picadura, que puede producir un leve enrojecimiento e hinchazón, no ocurra nada. Sin embargo, en ocasiones pueden transmitir parásitos y bacterias. Si hay letargo y fiebre los días posteriores, hay que acudir al médico.
Mosquitos
No suelen provocan mayor problema que enrojecimiento, picor e inflamación. Sin embargo, en algunas personas las picaduras de mosquito pueden producir reacciones alérgicas. Para tratarlas, lo mejor es la prevención y el uso de repelentes que impidan que el mosquito pique. Si ya se ha producido la picadura, se pueden utilizar tratamientos que alivian el picor y si hay reacción alérgica, una crema con corticoides e ir al médico.
¿Cuándo acudir al médico?
Hay que visitar al especialista en el caso de que sea necesaria la aplicación de cremas o lociones por picor o dolor persistente, generalizado o muy molesto, siempre que haya infección, si la persona presenta dolor torácico, hinchazón de cara, labios o lengua (o boca), dificultad para deglutir o respirar o pierde el conocimiento (entra en shock).