SABER VIVIR COMUNICACIÓN, S.L.
Por lo general, las molestias que ocasionan las picaduras de insectos no suelen ir más allá del enrojecimiento, la hinchazón y el picor en la zona del picotazo durante unos minutos u horas como máximo. Pero en la personas que tiene un sistema inmunitario debilitado o que es extremadamente sensible a estas mismas picaduras, su organismo reacciona de forma exagerada y descontrolada: es lo que llamamos una reacción alérgica, que puede ser muy peligrosa si se desencadena un shock anafiláctico.
Preguntas y respuestas
- ¿Quién puede sufrir alergia a las picaduras de insectos? Cualquier persona y en cualquier momento, pero si nunca ha tenido esta reacción, no es fácil identificar quién sufrirá una reacción alérgica grave ante una picadura de insecto. Es más probable que esta alergia aparezca en adolescentes y adultos. Es menos frecuente en niños.
- ¿Qué picaduras dan más alergia? Las de avispa, avispones, abejas, abejorros y algunas especies de hormigas, como las rojas.
- ¿Por qué se produce esta alergia? La reacción alérgica se debe a la acción de una sustancia que produce nuestro propio cuerpo, la inmunoglobulina E, que en personas con alergia a las picaduras, se acumula en cantidad exagerada como respuesta a un primer contacto con el veneno del insecto, y que actúa ante picaduras sucesivas liberando en la sangre gran cantidad de sustancias químicas en el torrente sanguíneo.
- ¿Con qué síntomas se manifiesta? Las manifestaciones de una reacción alérgica a una picadura de insecto pueden afectar a todos nuestros órganos y hacerlo muy rápidamente, en cuestión de solo unos minutos.
Los síntomas iniciales suelen presentarse en la piel, no únicamente en la zona de la picadura, sino también en el resto del cuerpo. Lo más habitual son el enrojecimiento y la aparición de ronchas o habones, que crecen y confluyen unos con otros. Cuando este es el único síntoma, hablamos de una reacción urticarial aguda.
Más preocupantes son los síntomas respiratorios, especialmente cuando la persona produce “pitos” al tomar y expulsar aire. La obstrucción de las vías respiratorias es grave (con alto riesgo de asfixia) si la piel adquiere un tono azulado, la lengua y el cuello se hinchan, baja de forma brusca la presión arterial y la persona pierde parcial o totalmente la consciencia. Esta reacción se denomina shock anafiláctico y puede ser peligrosa para la vida del afectado. - ¿Cómo puede ayudarte el alergólogo si tienes alergia a las picaduras? Este especialista te hará las pruebas necesarias para hacer un diagnóstico adecuado de tu alergia, identificará a qué insecto presentas sensibilidad y te indicará qué tratamiento específico necesitas, en caso de requerirlo. Estas pruebas consisten en pruebas cutáneas (RAST) y análisis de sangre para medir la cantidad en sangre de inmunoglobulina E. En los casos más graves, el alergólogo valorará si requieres inmunoterapia frente al veneno de ese insecto.
Para prevenir futuras reacciones alérgicas por picaduras, este especialista te enseñará también a administrarte adrenalina subcutánea inyectada, que es el tratamiento que se emplea en los casos de mayor gravedad. En caso de ser un niño el alérgico, el médico enseñará a los padres a inyectar la adrenalina.
Precauciones ¡imprescindibles!
Para evitar las picaduras, que siempre son una molestia, y sobre todo en el caso de las personas que saben que son alérgicas a ellas, todos debemos ser cautelosos en todo el verano para evitar el contacto con los insectos.
- No camines descalzo por la hierba.
- Evita permanecer en lugares donde haya nidos de insectos, como los charcos de agua o los pediluvios que hay junto a las piscinas.
- Los alimentos deben cubrirse o guardarse en recipientes cerrados.
- La basura, siempre tapada o cerrada.
- Usa prendas de ropa de colores suaves durante el día.
- Aléjate de las luces potentes por la noche (farolas, focos).
- Cierra las ventanas cuando te vayas a dormir si carecen de mosquiteras.
- No utilices perfumes o jabones perfumados.
- Los alérgicos a las picaduras deben llevar siempre un identificativo (una pulsera o medalla que indique que es alérgico) y portar una jeringuilla precargada autoinyectable de adrenalina.
- Al aire libre, usa un repelente de insectos. Aplícatelo en las zonas de piel descubiertas y también sobre la ropa, sobre todo por la noche. El Ministerio de Sanidad recomienda los repelentes de insectos que contienen el componente químico IR3535. Se ha comprobado que esta sustancia es un ingrediente eficaz y seguro frente a diferentes tipos de insectos (mosquitos, mosca negra, garrapatas), no es tóxica y además presenta las ventajas de que no deja la piel pegajosa y es prácticamente incolora.
- Si vas a viajar a países tropicales, habla con un profesional sanitario para que te dé las indicaciones necesarias para prevenir picaduras y el riesgo de contagio de enfermedades.
¡Ya me ha picado! ¿Qué hago?
Para disminuir la absorción de veneno y controlar la reacción:
- Retira rápidamente el aguijón en si está visible.
- Limpia la zona de la picadura con agua y jabón.
- Eleva el brazo o la pierna afectados durante unos minutos para reducir la inflamación.
- Aplica frío en la zona de la picadura (compresas húmedas, hielo…).
Para ayudar a otra persona que haya tenido una reacción alérgica grave:
- Llama enseguida al teléfono de emergencias 112 y sigue las instrucciones del interlocutor.
- Administra a la persona una inyección de adrenalina subcutánea (solo si sabes cómo hacerlo).