SABER VIVIR COMUNICACIÓN, S.L.
No es solamente una fea costumbre que produce un efecto estético lamentable en nuestras manos. El hábito compulsivo de comerse las uñas (onicofagia) puede acarrear problemas más serios de lo que parece.
Si no te vales sin ayuda de los demás y no puedes caminar, terminas limitando tus actividades, apenas querrás salir de casa y la ansiedad puede llevarte a una depresión.
Es un condimento imprescindible en la repostería española, y en otros países, como en Marruecos o India, la utilizan incluso para realzar el sabor de carnes y arroces, a los que aporta además un aroma muy atractivo que evoca a Oriente.
La enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte y de hospitalización en la población española. Descubre cómo calcular dicho riesgo eficazmente...
En estos meses de verano, cuando las temperaturas suben repentinamente y se mantienen muy altas durante días –lo que conocemos como ola de calor–, tenemos que estar muy atentos a cómo reacciona nuestro cuerpo.
Tómatelo en serio: abusar de las bebidas alcohólicas supone riesgos importantes para tu salud cardiovascular.
Para regular la temperatura del cuerpo, eliminar toxinas, mantener hidratada la piel e incluso como reacción ante determinadas sensaciones psicológicas (nerviosismo, temor), el organismo pone en marcha un mecanismo natural: la sudoración.
Desde los comienzos de la historia se han utilizado remedios caseros –surgidos de la sabiduría popular y la experiencia–, para evitar y aliviar las picaduras de insectos y criaturas marinas, que hacen de las suyas sobre todo en verano.
Si estás preparando un viaje en el que tendrás que estar varias horas sentado durante el trayecto, no te olvides de seguir las rutinas básicas que te recordamos en estas páginas. Evitarás serios problemas de circulación.
El cerebro es una máquina asombrosamente sabia, también en lo que se refiere a la regulación de la temperatura del cuerpo: una glándula que hay en su interior –el hipotálamo– actúa como un auténtico termostato, pues recibe información desde distintas partes del cuerpo de la temperatura ambiental y pone en marcha los mecanismos necesarios para que el organismo se mantenga en torno a 37 grados.