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Alrededor de un 20 por ciento de las mujeres y un 10 por ciento de los hombres sufre hinchazón en las piernas. ¿Por qué sucede? Con la edad, las válvulas del interior de las venas, encargadas del retorno de la sangre al corazón, dejan de funcionar con normalidad y la sangre suele quedarse acumulada.
La edad (la hinchazón de piernas afecta cuatro veces más a los mayores de 60 años) es el principal factor de riesgo para la insuficiencia venosa, pero también lo es el sexo: es el doble de frecuente en las mujeres que en los hombres. Otros factores pueden ser el embarazo, la menopausia, la menstruación o el sedentarismo. Aunque no podemos evitar muchas de estas causas, sí podemos adquirir unos hábitos y desterrar otros.
- El exceso de peso y el estreñimiento favorecen estas molestias. Cuidar tu alimentación es, por ello, fundamental.
- Practica ejercicio diariamente. En verano, caminar y nadar están a tu alcance.
- Evita permanecer quieto o sentado durante mucho tiempo. Camina o haz ejercicios sencillos para favorecer la circulación venosa.
- Pon las piernas en alto en cuanto te sientes a descansar. Y si trabajas sentado, usa reposapiés. Por la noche lo ideal es dormir con los pies elevados 15 cm.
- Usa la ducha mejor que el baño y termina con agua fría en las piernas en sentido ascendente.
- Si las sientes pesadas tras una larga jornada, aplícate geles de masaje siempre de abajo hacia arriba.
- Evita la ropa ajustada, los tacones (siempre menos de 6 cm) y los ambientes muy calurosos.
Remedios caseros
- Las medias de compresión pueden ayudarte a minimizar el problema si tenemos tendencia a la hinchazón o cuando nuestra postura en el trabajo es estática.
- En ocasiones los masajes de drenaje linfático impartidos por expertos pueden aliviar el edema y el dolor.
- También podemos aplicarnos geles de composición no grasa con extractos de plantas y mentol que refrescan las piernas.
- Para un efecto más duradero hay ampollas y cápsulas con extractos de estas plantas (hamamelis, rusco, vid roja y castaño de Indias) cuyas propiedades tonificantes y vasoconstrictoras favorecen el retorno de la circulación.
- También hay hierbas que se pueden tomar en infusiones cuando la causa es la retención de líquidos. El té de boldo, el diente de león, el té verde y la infusión de hojas de abedul son muy diuréticas y ayudan a reducir la inflamación y a expulsar líquidos retenidos.
Ojo a la dieta
No metas toxinas al cuerpo
Una alimentación inadecuada puede provocar hinchazón de piernas, ya que puede debilitar nuestros tejidos, de ahí esa acumulación de líquido. Además, cuando nuestra dieta no es la adecuada las toxinas se acumulan en nuestro revestimiento intestinal, causando enfermedades en el estómago y acidificando la sangre. Elimina los productos salados, refinados, fritos o muy condimentados. También los vinagres y mostazas, las harinas refinadas y evita consumir con frecuencia dulces, carnes rojas y lácteos enteros.
Cuidado con los fármacos
Algunas medicinas favorecen la hinchazón, como los antidepresivos, los prescritos para la presión arterial, los tratamientos hormonales, la testosterona o los esteroides.