SABER VIVIR COMUNICACIÓN, S.L.
- Acción desinfectante y cicatrizante: Mojar un pedazo de algodón con dos o tres gotas de aceite esencial de lavanda y aplicar sin frotar sobre las heridas y quemaduras, el eczema y las picaduras de insectos.
- Acción antiinfecciosa: Para mejorar los resfriados y sinusitis, hacer vahos con una o dos gotas en agua caliente).
- Acción calmante:
- Para combatir el insomnio, impregnar la almohada con dos o tres gotas.
- Para el dolor de cabeza, mojar los dedos y masajear las sienes.
- Para aliviar los nervios y el estrés, verter cinco o seis gotas en el agua del baño.
- Acción antiparasitaria: Para prevenir los piojos, aplicar una gota detrás de las orejas. Para eliminar los parásitos intestinales, tomar una gota en un terrón de azúcar (uno diario durante tres días).
- Acción contra el dolor muscular y reumático: Friccionar las zonas contracturadas y afectadas por dolor reumático con unas gotas.
Lavanda seca
La planta florece en verano. Recolecta los extremos de los tallos floridos y consérvalos en manojos colgados boca abajo en un lugar fresco y ventilado y a la sombra hasta que se sequen del todo.
- Una vez secos, desmenuza los tallos de lavanda e introdúcelos en bolsitas de tela para perfumar los armarios o muebles zapateros.
- Para aromatizar las habitaciones y los cuartos de baño, puedes mezclar lavanda con otras especies de hierbas aromáticas y guardarlos en cajas o bolsitas.
¿Sabías qué…? Esta planta también recibe el nombre de “espliego”.