SABER VIVIR COMUNICACIÓN, S.L.
Seguro que habrás oído hablar alguna vez de la zona de confort. E incluso, hace años, se suponía que te ayudaba a alcanzar el éxito. Sin embargo, hoy se cree todo lo contrario. Situarse de forma inamovible en ella puede estancarnos e, incluso, impedir que vivamos la vida que nos merecemos. Y es que la zona de confort no está compuesta solo de cosas agradables.
También la engloban situaciones desagradables, pero a las que ya nos hemos acostumbrado. Es decir, forman parte de nuestra rutina. Por eso, se dice que la vida real comienza cuando la zona de confort termina.
Rétate y descúbrete
¿Crees que no eres capaz de hacer y terminar el Camino de Santiago? ¿Dudas si serás apta para esa nueva función que te han propuesto? Si no te retas y te arriesgas, no lo sabrás nunca. Es cierto que va a suponer un esfuerzo y que te pondrás a prueba en numerosas ocasiones. Quizá incluso desesperes. Pero con empeño lograrás aquello que te proponemos y descubrirás un nuevo "yo" al superar esos pequeños obstáculos. Ese será uno de los primeros beneficios que obtendrás al salir de tu zona de confort y que te ayudará a ganar más autoestima.
Aumentará tu creatividad y tu productividad
Salir de la zona de confort también aumenta la creatividad y la productividad. Y es que nuestro cerebro necesita estímulos nuevos para mantenerse activo y alerta. La rutina, por el contrario, lo estanca.
Te volverás más flexible y tu cerebro más resiliente
Cuando nos instalamos en la zona de confort tendemos a mirar además en una sola dirección. Solemos ignorar otros puntos de vista e incluso nos alteramos ante la expectativa de que alguien nos lleve la contraria o, simplemente, tenga una opinión distinta. Sin embargo, cuando intentamos salirnos de nuestra rutina poco a poco percibimos y apreciamos otras formas de ver la vida, miramos en más direcciones, nos volvemos más flexibles y nos adaptamos mejor al cambio. Nuestro cerebro también se beneficia y se vuelve más resiliente y esto implica superar con más facilidad cualquier problema, situación difícil o traumática con la que te enfrentes durante tu vida.
Vivirás más y mejor
Realizar cambios en tu vida para salir de la zona de confort también tiene un impacto en tu calidad de vida e incluso en tu salud, sobre todo, en prevenir el deterioro cognitivo. Por otro lado, los cambios que realicemos pueden estar directamente relacionados con hábitos que tengan un impacto directo en nuestra salud, por ejemplo, hacer más ejercicio físico, caminar más pasos cada día o llegar más lejos o retarse a variar la alimentación y aprender nuevos métodos culinarios más saludables. Y es que salir de la zona de confort no te exige hacer grandes cambios. Haz pequeñas modificaciones en tu vida diaria. Notarás los beneficios.
No necesitas hacer grandes cambios para salir de la zona de confort. Introduce pequeñas modificaciones en tu rutina diaria
Tú puedes
- Por un día, haz lo contrario a lo que has realizado siempre. Por ejemplo, ve a la oficina por otro camino.
- Cambia de sitio algún mueble o la vajilla. Son pequeños movimientos que te permiten variar la rutina.
- ¿Te cuesta relacionarte? Apúntate a una actividad en la que tengas que hacerlo constantemente. Tertulias, por ejemplo.
- Practica meditación o mindfulness. Provoca cambios muy positivos en tu cerebro y, poco a poco, te dará la valentía y confianza necesarias para salir de tu zona de confort.