Dime cómo andas… y te diré qué salud tienes

¡Camina bien!

• Mantén la vista al frente, sin mirar al suelo.
  
  
• La barbilla debe apuntar de forma paralela al suelo, manteniendo una posición neutral del cuello.
  
  
• Mantente relajada, los hombros hacia atrás y abajo, en posición relajada. Esto facilitará el movimiento de brazos de forma natural. Las manos deben permanecer relajadas, no cierres los puños. Si te resulta más cómodo puedes mantener tus brazos en una posición de 90 grados.
  
  
• Saca el pecho ligeramente, como si te tirasen suavemente de él con un hilo.
  
  
• Mete el obligo hacia dentro ligeramente para mantener tus activados. Con este simple acto podrás evitar lesiones en tu espalda.
  
  
• Usa el método talón-puntera. ¿Qué quiere decir esto? El talón toma contacto con el suelo para, finalmente, empujar con la puntera.
  
  
• Camina con la zancada más larga, pero que te resulte natural. No aumentes la zancada para aumentar la velocidad, puede provocarte lesiones. Si quieres caminar más rápido, da más pasos.
  
  
• Calzado adecuado: es muy importante llevar unas zapatillas adecuadas cuando empezamos a caminar, como ejercicio. Las suelas deben ser flexibles, deben ser la talla correcta y debes cambiar de zapatillas una vez al año.
  
  

¿Quieres saber cómo es tu pisada?

• Colócate de pie con las piernas ligeramente separadas y los pies apoyados totalmente en el suelo, preferiblemente descalza.
  
  
• Flexiona tus rodillas tres veces, dejando que las piernas se muevan a su antojo. A la tercera flexión detente manteniendo la postura.

Si has terminado con las rodillas pegadas eres pronador. Si las piernas están más o menos juntas, pero no se pegan, eres neutra, y si las piernas están muy separadas eres supinador.

¡Por eso no caminas bien!

• Hay veces que no caminamos bien por dolencias ajenas al caminar. De hecho, un médico solo con verte andar, ¡sabría que patología tienes!
  
  
• Juanetes: Son unas protuberancias en la parte interna del pie, al lado del dedo gordo. Cuando los juanetes aparecen el dedo gordo acaba apoyándose en el otro dedo en lugar de apuntar, como debería, hacia delante. Los juanetes van creciendo progresivamente, haciendo que la protuberancia ósea y la inclinación del dedo gordo aumenten.
  
  
• Artritis: Inflamación de tus articulaciones.
  
  
• Uñas encarnadas: Es la consecuencia de un fragmento de uña que penetra en la carne y te provoca inflamación y dolor.
  
  
• Piernas de diferente longitud. Las personas con ligera diferencia en la longitud de sus extremidades tienen más probabilidades de sufrir un problema degenerativo en la rodilla o en la cadera.
  
  
• La miositis es la inflamación de los músculos esqueléticos, que también se llaman músculos voluntarios. Estos son músculos que se controlan voluntariamente y que ayudan a mover el cuerpo. Una lesión, una infección o una enfermedad autoinmune pueden causar miositis.
  
  
• Pieriostitis tibial (dolor en las espinillas).
  
  
• Tendinitis.
  
  

Tienes pisadas de...

• Supinador: Es la persona que tiende a separar las piernas a la hora de caminar y apoya la parte más externa del pie al salir a correr, con lo que esta zona es la que recibe casi todo el impacto.
  
  
• Pronador: Son todo lo contrario. A la hora de caminar lo que les sucede es que tienden a juntar las piernas y a pisar con la parte más interna de la planta del pie.