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¿Qué es?
Se trata de un pequeño aparato, del tamaño de un teléfono móvil, que graba el ritmo y la frecuencia del corazón durante 24 o 48 horas, según las indicaciones médicas. Esta prueba, muy frecuente, no requiere hospitalización alguna y permite hacer tu vida de forma cotidiana. Eso sí, llevando contigo este dispositivo.
¿Qué tipos existen?
- Holter continuo: (Holter convencional): Es un registrador digital, como las cámaras de fotos digitales actuales (almacenan la información en tarjetas de memoria) que se activan durante 24 o 48 horas. Pesan muy poco, apenas 150 gramos.
- Holter intermitente: Graba la actividad del corazón por espacios breves de tiempo. El paciente debe activarlo si siente algún tipo de molestia cardíaca.
- Holter implantable: Este aparato se implanta en la piel (en la zona del pecho) mediante una pequeña incisión y con anestesia local. Se activa automáticamente cuando el paciente sufre algún tipo de arritmia o mareo. Suele llevarse durante aproximadamente doce meses.
¿Cómo se realiza?
- No es una prueba que requiera ningún tipo de preparación previa.
- No es dolorosa.
- Se trata de cinco o seis cables unidos a unos parches adhesivos (electrodos) que se colocan sobre el pecho. Esos cables, a su vez, también se unen a una grabadora, una pequeña cajita que puede ir colocada alrededor de la cintura (a modo de cinturón) o colgada al hombro (a modo de bandolera).
- La señal eléctrica del corazón registrada se almacena para que, más tarde, el cardiólogo analice esos datos.
- Al colocarte el cardiólgo el Holter, recibirás una hoja-diario con tus datos personales y las fechas de inicio y fin de la grabación. En este mismo documento deberás anotar a qué hora y qué tipo de molestias sientes para que el médico pueda contrastarlo con los datos del aparato.
¿Cuándo se debe hace?
El registro permite detectar alteraciones del ritmo, la frecuencia (número de latidos por minuto) y detectar zonas del corazón que no reciben impulsos eléctricos o los reciben de forma insuficiente o anormal. Por tanto, se suele recomendar a personas que puedan tener bradicardia (frecuencia cardíaca lenta), taquicardia (frecuencia cardíaca rápida), bloqueos (impulsos eléctricos que no se trasmiten o se trasmiten de forma alterada) o infartos (zonas del corazón que no responden a los impulsos eléctricos).
¿Conlleva riesgos?
Esta prueba no entraña riesgos serios. Puede que produzca unas leves molestias como que el pequeño aparato te resulte algo molesto para dormir o que las cintas adhesivas de los electrodos te causen algún tipo de irritación en la piel, pero nada más.
Al estar usando el dispositivo, evita:
- Usar mantas eléctricas.
- Pasar por áreas de alto voltaje.
- Acercarte a imanes.
- Los detectores de metales.