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Su agradable sabor y sus propiedades nutricionales lo convierten en un alimento muy saludable y aconsejable en todo tipo de dietas sanas y equilibradas.
Variedad de color
Existen muchas variedades de guisantes, con distintos colores, formas y sabores. Descubre el tuyo:
- Guisante verde. Es un guisante redondo, de piel lisa y textura suave, que se puede tomar fresco o seco. Es la variedad de mayor producción. Su sabor es menos dulce conforme más seco esté, debido a su mayor contenido en almidón.
- Guisante azul. Se caracteriza por el color azul verdoso de su vaina. Es un guisante redondo que puede resultarte un poco amargo si lo tomas fresco. Consejo: déjalo madurar para endulzarlo un poco.
- Guisante amarillo. Es un guisante de color amarillo, redondo, de sabor dulce y textura cremosa. Su sabor es más neutral (se asemeja al sabor de un cereal).
- Guisante Marrowfat. Verde, redondo, de gran tamaño, piel tierna y su sabor dulce. Su piel fina tiende a deshacerse durante la cocción.
- Guisante enano. Son los más pequeños de toda la familia. Sin embargo, también son los más dulces de toda la amplia gama de guisantes.
- Tirabeque. Se caracteriza porque la vaina que cubre sus semillas es tierna, a diferencia de la de otras variedades que es dura e incomestible. Normalmente, podrás verlos en los mercados durante los meses de más frío.
Sus propiedades
Puedes consumirlos frescos, pero también secos. Sus nutrientes, sin embargo, cambian según los consumas de una forma u otra. Los frescos son mucho más dulces y sabrosos y contienen mucha más agua que los secos, pero menos proteínas, grasas e hidratos de carbono. En general todos los guisantes son:
- Ricos en fibra: Adecuados para regular los niveles de azúcar y colesterol en sangre. Estas propiedades son muy interesantes ante cualquier dolencia cardiovascular.
- Proteínas: Si apuestas por una dieta vegetariana, al igual que la soja, las proteínas de los guisantes son muy beneficiosas para aquellas personas que toman pocas proteínas en su dieta.
- ¡Siéntete fuerte! Los guisantes son ideales en casos de cansancio o debilidad gracias a su riqueza en minerales y oligoelementos.
- Su riqueza en vitaminas del grupo B, fortalece el sistema nervioso. Destaca su contenido en vitamina B1 o Tiamina que es muy importante para el sueño, el estado de ánimo y el apetito. El estrés es un enemigo de esta vitamina.
- Minerales. Los guisantes contienen minerales como hierro, fósforo, magnesio, cinc y potasio. Unos 150 gramos de guisantes frescos cubren aproximadamente la cuarta parte de las necesidades diarias de hierro, la quinta de las de fósforo y la sexta de las de magnesio.
Cómo consumirlos y conservarlos
Los guisantes son una de las pocas legumbres que pueden tomarse crudas y, en este sentido, se asemejan a las verduras. Pero los frescos solo pueden consumirse durante los meses de primavera.
Los congelados, en conserva o secos, son una buena opción durante el resto del año.
Si los compras frescos fíjate bien en: Las vainas deben presentar un aspecto liso y brillante, con unos guisantes no demasiado gruesos, tiernos y poco harinosos. Hay que desgranarlos justo antes de cocinarlos. Los guisantes frescos tienen la ventaja de desgranarse con facilidad y no necesitan ser lavados.
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