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En casi ninguna cocina falta un botecito de esta hierba aromática. Su popularidad se la debe, sobre todo, a la gastronomía italiana, que la utiliza para aromatizar y dar sabor a muy diversos platos: pizzas, pasta, ensaladas... Pero seguramente desconoces que el orégano tiene, además, una larga lista de propiedades beneficiosas para la salud.
Aporta más de treinta compuestos antioxidantes, y son muy variadas sus aplicaciones en uso interno y externo, e incluso en el campo de la cosmética.
La infusión de orégano se prepara con una cucharadita por taza de hojas y flores secas desmenuzadas. Hay que dejarla reposar diez minutos. Se puede endulzar con miel.
Como toda planta medicinal, el orégano tomado como tratamiento tiene posibles efectos secundarios que hay que tener en cuenta. Consultale a tu médico.
Uso interno: En infusión
- Para el aparato digestivo: Ayuda a eliminar los gases, es estimulante biliar y protege de las enfermedades del hígado. Hay que tomar una taza tras cada comida.
- Para las vías respiratorias: Ayuda a mejorar la tos, el asma, los resfriados, las bronquitis y otras afecciones. Es expectorante y antiinflamatorio.
- Para la circulación: Contiene sustancias antiagregantes que favorecen la circulación y mejoran el riego del cerebro, por lo que puede contribuir a mejora la memoria.
- Para la mujer: Alivia las reglas dolorosas y los síntomas relacionados (retención de líquidos, dolor de cabeza, irritabilidad...)
Uso externo: varias aplicaciones
- Para combatir la laringitis y la amigdalitis: Hacer gárgaras con la infusión dos cucharaditas de hierba desmenuzada en medio litro de agua hirviendo.
- Para calmar dolores musculares y reumáticos: Aplicar la infusión en cataplasmas o en fricciones sobre la piel.
- Para curar heridas: Aplicar unas gotas de aceite esencial con una gasa.
Cultívalo en tu terraza
Esta planta tiene la ventaja de que se puede cultivar en una maceta mediana en cualquier terraza o jardín. Produce hojas y flores durante cinco o seis años y requiere pocos cuidados. El mejor momento para la recolección de las hojas es durante el verano.
- Forma manojos y cuélgalos boca abajo en lugar ventilado y a la sombra.
- Cuando esté bien seco, desmenúzalo y guardalo en recipientes muy bien cerrados en lugar fresco y seco. Te durará mucho.
¿Sabías qué...? Una ramita de orégano en una botella de aceite o vinagre le transmite su fragancia.