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La periodontitis es una enfermedad crónica caracterizada por la inflamación de los tejidos que soportan las piezas dentales, provocando la movilidad de los dientes que pueden acabar perdiéndose. Afecta a casi el 10 % de la población mundial, según datos de la OMS, y puede permitir el desarrollo de otras enfermedades, comprometiendo seriamente el estado de la salud general.
Diabetes
Los pacientes con diabetes tienen una incidencia mayor de gingivitis, periodontitis y caries. Al no tener un control glucémico eficiente, automáticamente se genera un aumento del riesgo y la gravedad de la periodontitis.
Alzhéimer
Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), en España, existen 800.000 personas con alzhéimer y cada año se diagnostican unos 40.000 casos nuevos.
El deterioro cognitivo progresivo de esta enfermedad limitaría los hábitos de higiene bucal y afectaría a la salud bucodental. Por otra parte, algunos estudios plantean la posibilidad de que una bacteria que interviene en la inflamación de las encías también afecte a los procesos neuroinflamatorios relacionados con la aparición o empeoramiento de esta dolencia.
Disfunción eréctil
Según diferentes estudios, las enfermedades de las encías podrían originar una inflamación sistémica integral; afectando al endotelio, una pequeña capa que cubre todos los vasos sanguíneos.
Esta inflamación puede afectar y provocar disfunciones tanto en el sistema cardiovascular como en los vasos cavernosos del pene.
En 2018, investigadores de la Universidad de Granada señalaron que "los pacientes con periodontitis tienen 2,28 veces más posibilidades de sufrir problemas de impotencia". El 74 % de los pacientes con problemas de erección analizados presentaban periodontitis.
Prevenir, la mejor medicina
El primer consejo para evitar este problema en las encías es una correcta higiene oral, cepillándose los dientes correctamente después de cada comida y usando hilo dental para que no aparezca placa bacteriana.
Es importante llevar una alimentación equilibrada en la que se eviten azúcares y una buena hidratación para impedir la sequedad de boca.
Finalmente, es imprescindible visitar regularmente al dentista, sobre todo si existe algún factor de riesgo. En caso de que haya acumulación de placa en los dientes, procederá a una limpieza en profundidad para su eliminación.
Actualmente, contamos con tecnología punta para realizar limpiezas profundas, como un dispositivo moderno que actúa sobre la superficie dental, eliminando manchas, sarros y la película bacteriana que cubre dicha superficie.
Aparte de limpiar, también pule la superficie de los dientes, dejándola perfectamente lisa y proporcionando a los pacientes un agradable sabor de boca. Y todo, sin necesidad de utilizar goma o pasta de profilaxis y sin causar el más mínimo daño ni en el esmalte ni en los tejidos.
DR. DAVID CARRALERO
Director Médico de Clínica Carralero,
en Xàtiva (Valencia) y Dentista COE.
