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Aunque las causas exactas de este incremento se desconocen, todo apunta a que tienen mucho que ver con ello los cambios ambientales que hemos experimentado en los países desarrollados durante las última décadas.
Esto se suma a que la sociedad actual vive también más deprisa en general. Aunque ya se sospechaba que la tensión nerviosa que ello produce podía agudizar los síntomas de la dermatitis atópica, estudios muy recientes realizados por el Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia) y la Universidad de Wroclaw (Polonia) han confirmado que, efectivamente, los síntomas empeoran sensiblemente cuando se atraviesa por una situación de estrés y ansiedad. La dermatitis atópica, al igual que la psoriasis, cursa con picor intenso, enrojecimiento, inflamación y formación de vesículas y costras en la piel, lesiones que requieren cuidados continuos. El picor suele aumentar por la noche e impide descansar adecuadamente, lo que también afecta
al estado emocional.
Corticoides + Hidratación
Estas molestias pueden aliviarse con la ayuda de cremas con corticoides tópicos aplicados junto con una crema emoliente (hidratante) sin parabenos ni perfumes que esté específicamente indicada para su uso combinado. Sin embargo, muchas personas con dermatitis atópica solo utilizan cremas que alivian temporalmente el picor porque desconfían de los corticoides, pensando que tienen riesgos para su salud.
Sin embargo, según los dermatólogos, los corticoides son eficaces y seguros siempre que se administren de acuerdo con las indicaciones que le haya recomendado el médico al paciente. Si estos medicamentos tópicos se acompañan de una crema hidratante indicada para frenar la inflamación y restablecer el equilibrio
de la piel, la recuperación es más completa.
Ocúpate de tu piel
Aún en demasiadas ocasiones, muchas personas con dermatitis atópica pasan meses o años yendo de un dermatólogo a otro sin que ninguno diagnostique con acierto su afección hasta que esta entra ya en una fase avanzada. Ello se debe a que las lesiones que produce esta enfermedad en la piel son comunes a otras dolencias y pueden confundirse entre sí.
Pero también son muchos los afectados a quienes los síntomas les pasan desapercibidos, o simplemente no les dedican la atención que se merecen. Con el tiempo, la dermatitis atópica se acentúa y las lesiones y molestias se vuelven más serias.
Antes de llegar a estas situaciones, ocúpate de tu piel. Ve al dermatólogo e insiste en encontrar el motivo de tus síntomas para poderlos tratar adecuadamente.